Hace unas semanas, aprovechando uno de esos escasos días de vacaciones, nos escapamos a casa de un familiar, amante de la naturaleza y la montaña. Nos sorprendió, en su jardín, encontrar una entrañable mimbrera.
Y de ahí, pensamos en escribiros este post. Ya que, de bien seguro, más de uno se preguntará… ¿De donde sale el mimbre? Pues de la mimbrera, contestaréis muchos, pero si os animamos a describirla, seguro que sólo los más forofos de esta útil fibra natural, recibiréis el merecido aprobado.
La realidad, es que existen varias especies, nombradas en botánica como “Salix”, que pueden ser desde arbustos grandes a árboles medianos. Crecen en ambientes húmedos, cerca de los ríos, y pueden tener un tronco grande desde el que salen brotes tiernos, de los cuales podremos obtener nuestro ansiado mimbre. A continuación, el ejemplar de nuestro amigo:
Bien, entre lo gran fotógrafo que soy, y la naturaleza salvaje, no es fácil de distiguir, pero es el gran tronco central, del cual salen numerosos brotes finos
De origen Europeo y del oeste de Asia, crece con rapidez, y se puede plantar por esquejes. Gracias a su rápido crecimiento, y a la flexibilidad de sus brotes, con el podemos crear algunos ejemplos del que llamaremos “arte natural, o vivo”. Seguro que todos conoceréis las típicas formas que se obtienen con brotes de bambú, que se hicieron populares hace unos años, con bonitas espirales. Ya sabéis lo que nos gusta la decoración, pues ahora hablamos de decoración de la naturaleza! Aquí, algunas manualidades con mimbre, como esta pequeña escultura a la naturaleza…
O este bonito arco, que hace de entrada a este magnífico huerto ecológico.
Y lo que más nos gusta, este columpio, al frente del anterior huerto, para contemplar tranquilamente los frutos del duro trabajo. Se ha decorado con dos esquejes de mimbre, ya convertidos en finos troncos, de los cuales salen multitud de brotes verdes.
Desgraciadamente, estas imágenes se tomaron justo al inicio de la primavera, en una zona montañosa, por lo que los brotes no están en su máximo esplendor, aunque comenzaban a asomar pequeñas hojas verdes. De bien seguro que ahora será una maravilla verde. Prometemos mostraros más fotos del resultado final florecido, aunque nos falta el tiempo para disfrutar de este hermoso paisaje.
Para acabar, nunca pueden faltar, en una casa rural como la anterior, las necesarias y preciosas cestas de mimbre!
¿Os ha gustado? Pronto, más, en nuestro blog de decoración online!